Treinta años de vida profesional nos van cruzando con diferentes desafíos, marcas, categorías de productos, metodologías de trabajo, tendencias, necesidades, códigos y modas. Y hay algo que no cambia: siempre necesitamos desarrollar un pensamiento estratégico, conceptos sólidos e ideas que interpelen. Vamos conociendo y aprendiendo de profesionales que se apasionan por hacer las cosas bien o mejor, por hacer cosas distintas y que hagan bien; Que le hagan bien a las marcas, a los productos y sobre todo a las personas. Trabajar en equipo con y para personas comprometidas, que no les de lo mismo, es sin dudas, trabajar mejor. 

PENSAMIENTOS
LÍQUIDOS
IDEAS SÓLIDAS